después de estar por ahí leyendo blogs bastante más interesantes que el mío decidí que no valía la pena seguir con el capricho este...
Pero hoy me ha ocurrido algo que tengo que contar. He pensado en una carta a un periódico, pero seguro que no la publicarían. Así que...
Como cada mañana me he levantado a las 6 para ir a trabajar. A las 7'15 he cogido el bus y (qué suerte) me he sentado apenas dos paradas después. Avisar que voy con mi iPod (¡pija!) y mi libro. El libro pq me gusta leer, el iPod pq me molesta el ruido del bus, la gente...
Total, me siento al lado de un "señor". Tal cual he puesto el culo en el asiento me he dado cuenta que el tipo me miraba y me ha recordado al salido que encontré una vez así que me he puesto alerta. 1 semáforo después el tipo me da un golpecito en la muñeca, me quito el auricular (igual se ha perdido) y el tipo me dice que "llevas la música muy alta, bájala que la siento". PARA EMPEZAR ES OÍR, NO SENTIR. Una vida de obediencia ciega ha hecho que la baje (un poco solo, que el autobús mete mucho ruido).
"¡Mierda! Pq seré tan tonta como para hacer caso al tipo este. tendría que haberle dicho que a mi me molestaba su chaqueta azul eléctrico y que me aguanto" iba pensando cuando se ha acabado el album que estaba escuchando: el último disco de Slayer (metal chulo, chulo).
Total que he aprovechado para poner el mismo disco y el volumen original.
Otra vez el tipo: "la has bajado muy poco"
"es mi música y es mi oido"
"me molesta"
"a mi me molestan muchas cosas y me aguanto"
"no estás en tu casa"
"usted tampoco"
"es un lugar público y tienes que respetar a la gente"
"¡¡son la 7'35 de la mañana!!" y con esa magnífica frase (?) he seguido "leyendo" mi libro ("el martillo cósmico II" de RAWilson).
"si es que la juventud ya no tiene maneras. ¿Me has oído? que bajes la música"
"le he oído"
"nsghuqrehqrngqi" (o sea, algo incomprensible) y se ha largado. (cuando me he bajado del autobús he visto que se había cambiado de asiento)
Los adictos a los auriculares como yo, estarían de acuerdo conmigo que aún podía haber puesto la música más alta pq esta conversación tan y tan filosófica de buena mañana la he mantenido sin quitarme los auriculares. Le oía. La música no estaba lo suficientemente alta.
Y esto me ha hecho pensar en una conversación que tuvimos ayer con mi marido respecto al hecho de prohibir fumar casi en todas partes. Los que me conocen saben que no fumo. No tengo nada en contra del humo. Cada cual que haga con sus pulmones lo que quiera. Aparte, si dejar de fumar asegurara la vida eterna, tal vez tendrían un punto a su favor los detractores, pero sinceramente, nos vamos a morir igual. Y el cancer de pulmón seguirá siendo una causa de ello. Entonces qué prohibiran ¿LA GASOLINA? "Al igual" que dicen por ahí.
Pues lo de mi música esta mañana es comparable. ¿Por qué la gente se cree con derecho a decir qué pueden o no pueden hacer los demás?
En fin... Como dicen por ahí: tipo de la chaqueta azul eléctrica: que te compres un coche
